La Ecología como rama de la ciencia ha tenido un crecimiento muy importante en términos de producción de conocimiento en los últimos 50 años. La gran diversidad de organismos y ecosistemas que existe en el planeta ha recibido una gran atención no sólo para describir su gran riqueza de especies sino también para entender su fisiología, comportamiento y la red de interacciones que mantienen el funcionamiento de los diferentes sistemas naturales. La investigación en el campo de la Ecología ha permitido descubrir los mecanismos moleculares y fisiológicos de los organismos y sus procesos de adaptación que les permite sobrevivir en diferentes ambientes desde las profundidades del mar hasta las altas montañas, desde los grandes desiertos hasta las remotas selvas tropicales. Se han descubierto infinidad de formas y estrategias de vida, diversos modos de interacción entre las especies y los mecanismos que permiten la coexistencia de los seres vivos en la naturaleza. El estudio de los procesos biogeoquímicos fundamentales que rigen los ecosistemas y la importancia de la diversidad de especies para su estabilidad y mantenimiento ha sido una de las grandes aportaciones para entender los procesos de los cambios locales y globales como el cambio climático.
Los procesos ecológicos ocurren a distintas escalas espaciales (i.e., locales a globales) y en varios niveles de organización biológica (i.e., individuos a ecosistemas). Cada nivel de organización está constituido por diversos sistemas complejos con múltiples interacciones entre sus componentes, y entre éstos y sus ambientes físicos particulares. Estos sistemas naturales son abiertos, dinámicos y susceptibles a pequeños cambios tanto en el tiempo como en el espacio, y dependen de diversos factores determinísticos y aleatorios. En síntesis, los científicos dedicados al campo de la Ecología han dedicado grandes e intensos esfuerzos a la descripción de los patrones de abundancia y distribución espacial y temporal de los seres vivos, así como los mecanismos y las causas que los determinan.
Lamentablemente, en paralelo a estos descubrimientos científicos, la modificación de los hábitats naturales por las actividades humanas ha llevado a la urgente necesidad de conocer con detalle el funcionamiento de los ecosistemas para poder hacer planteamientos de cómo mitigar los impactos negativos de estas actividades. No es posible proponer soluciones para restaurar un ecosistema alterado si no se conocen los principios básicos de su composición y funcionamiento. Además, el conocimiento de la biodiversidad tiene un gran valor no sólo por sus valores intrínsecos sino por su importancia económica en muchos de sus casos. La biodiversidad es parte de los tesoros naturales de las naciones y su riqueza el acervo que garantiza la vida en la Tierra. Los servicios que proveen los ecosistemas naturales a los humanos son fundamentales para su supervivencia ya que proporcionan todos los servicios de sustento, regulación y recreativos que permiten su desarrollo y bienestar social. En síntesis, el conocimiento de los ecosistemas naturales y de los seres vivos que los componen ha acompañado el desarrollo de la humanidad.
Dentro de este contexto, la creación de la Licenciatura en Ecología dentro de la UNAM en el año 2015, se fundamentó en la necesidad de iniciar la formación de estudiantes con una orientación científica con los conocimientos y las habilidades para comprender el funcionamiento de los ecosistemas naturales, desde sus componentes individuales hasta la complejidad de sus interacciones, tanto entre las especies como entre éstas con su medio. El entendimiento de los procesos y los mecanismos que explican el comportamiento de los organismos son básicos para cualquier tipo de aplicación, ya sea hacia la conservación, el manejo o el aprovechamiento de los recursos naturales. Áreas como la agricultura, la silvicultura, la medicina, la producción de alimentos, el control de plagas y enfermedades, entre otras, se ven directamente beneficiadas con la formación de recursos humanos de esta licenciatura.
Con la Licenciatura en Ecología, la UNAM impulsa una estrategia de impacto nacional e internacional en la formación de estudiantes en este campo de la ciencia. El objetivo es la formación de nuevas generaciones preparadas para atender problemas inmediatos y futuros en el campo de la Ecología. Sin el entendimiento de los conocimientos ecológicos fundamentales del funcionamiento de los ecosistemas naturales y de los sistemas socioecológicos, no es posible entender las alteraciones que sufren, producto del disturbio humano o natural. Este conocimiento contribuirá a comprender mejor los problemas socio-ambientales locales y globales, lo que permitirá generar las condiciones para alcanzar un desarrollo sustentable para el bienestar de las generaciones futuras.